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Medicina Táctica: Algunos Antecedentes




Las experiencias de los médicos de combate en la Segunda Guerra Mundial, Corea y Vietnam, junto con su creciente comprensión de la asistencia sobre el terreno, evacuación rápida, transporte y el tratamiento definitivo de los lesionados en combate, son las bases sobre las cuales se sustenta el cuidado táctico de las bajas en combate. 

Mientras los equipos de SWAT comenzaron a aparecer en la década de 1960, como consecuencia de incidentes como el del francotirador de la Torre de Texas, el tiroteo en Los Ángeles con el Ejército Simbionés de Liberación, y muchos otros actos, se reconoció que el apoyo médico de algún tipo sería necesario para las unidades en misiones de alto riesgo. 

El modelo propuesto se basó en el modelo militar del médico de combate, sugiriendo que fuera parte de la unidad táctica. Más concretamente, estos técnicos (básico al principio y luego de nivel paramédico) eran un equipo médico de operaciones especiales.

Algunos de los policías y paramédicos que formaban estas unidades tácticas, con frecuencia eran veteranos de Vietnam, durante muchos años en estados unidos, había muy pocas unidades a nivel nacional. 


Es importante hacer mención que para el mejor funcionamiento de un equipo médico táctico en una fuerza de seguridad pública, es necesario que el personal que lo integre tenga la formación en tres esferas: ser oficial de policía, ser proveedor de servicios médicos y ser oficial de técnicas especiales de intervención (técnicas SWAT). 

Por esta razón, y debido al alto costo de la capacitación del personal integrante de estos cuerpos, la mayoría de los equipos de SWAT, incluso hoy en día, utilizan el apoyo médico externo para su equipo.

Desde la década de 1960 hasta de la década de 1980 hubo un mosaico aislado de los equipos que desarrollaron sus propias versiones de apoyo médico táctico. La necesidad de reconsiderar la atención al trauma en el entorno táctico ha sido ampliamente reconocida. 

El proyecto Tactical Combat Casualty Care (CUIDADO TÁCTICO DE LAS BAJAS EN COMBATE) fue iniciado por El Comando de Guerra Naval Especial (Naval Special Warfare Command) en 1993, y continuado posteriormente por el Comando de Operaciones Especiales de Estados Unidos (U.S. Special Operations Command (USSOCOM)). 

Este esfuerzo desarrolló un conjunto de protocolos de atención al trauma en combate tácticamente apropiados que fueron publicados como suplemento en la revista de Medicina Militar en 1996. Las directrices del CUIDADO TÁCTICO DE LAS BAJAS EN COMBATE proporcionan a los médicos de combate estrategias de manejo del trauma en combate.



El primer curso de CUIDADO TÁCTICO DE LAS BAJAS EN COMBATE tuvo lugar en 1996 en la Oficina Médica Subacuática patrocinado por la Oficina de Medicina y Cirugía Naval (BUMED). Poco después, este entrenamiento fue obligatorio para todos paramédicos de los SEAL (grupos de operaciones especiales de la Armada de los Estados Unidos. Su nombre es un acrónimo de Sea, Air and Land (Mar, Aire y Tierra)). Desde entonces, ha ido ganado gradualmente aceptación en las Fuerzas Armadas. 

Así mismo ha encontrado una gran aceptación en la comunidad médica civil de las fuerzas de seguridad. La incorporación de las directrices del CUIDADO TÁCTICO DE LAS BAJAS EN COMBATE en el manual de Soporte Vital al Trauma Prehospitalario (PHTLS) fue un importante avance en el proceso de transición del CUIDADO TÁCTICO DE LAS BAJAS EN COMBATE. 

La cuarta edición de este manual, publicado en 1999, contiene por vez primera un capítulo de medicina militar. Las recomendaciones contenidas en el manual PHTLS llevan la aprobación del Comité de Trauma del Colegio Americano de Cirujanos y de la Asociación Nacional de Técnicos en Emergencias.
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