Nueva York, EE.UU. - Un reciente informe de Uber revela que los conductores en la ciudad de Nueva York que trabajaron un promedio de 32 horas semanales durante 50 semanas obtuvieron ingresos de alrededor de $52,900. Esta cifra supera notablemente el salario base de $39,386 que reciben los técnicos en emergencias médicas (TEM) en su primer año de servicio en la ciudad.
A pesar de las intensas horas de formación y el aprendizaje de habilidades para salvar vidas, los TEM deben esperar hasta cinco años para alcanzar un salario máximo de $59,534 más beneficios, según datos compartidos por el New York Post. Esta disparidad salarial ha llevado a que muchos técnicos opten por abandonar su carrera en el sector de emergencias para emplearse en plataformas como Instacart, Uber o Lyft. “Tengo amigos que han dejado este trabajo para dedicarse a esas plataformas,” comentó Oren Barzilay, presidente del sindicato Local 2507, que representa a más de 4,100 técnicos y paramédicos de la ciudad.
A diferencia de los TEM, los conductores de Uber, cuyo salario está regulado por la Comisión de Taxis y Limusinas de Nueva York, han recibido cinco aumentos desde 2020, incluyendo un incremento del 3.49 % en marzo, ajustado por inflación.
Mientras tanto, el personal del Servicio Médico de Emergencia de la ciudad lleva más de dos años trabajando sin contrato. Barzilay subraya que la demanda central del gremio es lograr la “paridad salarial” con otros servicios uniformados, una promesa que el alcalde Eric Adams hizo en 2021 y que aún está pendiente de cumplir.
La situación ha generado un creciente debate sobre la valorización de las profesiones esenciales, en particular aquellas que implican riesgos y habilidades técnicas. La presión sigue aumentando para que los legisladores tomen medidas que garanticen una compensación adecuada a los TEM y otros trabajadores de emergencias, destacando la importancia de su rol en la seguridad y el bienestar de la ciudad, especialmente en tiempos de crisis.