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Crismel Morel Pujols Licda. Psicología Clínica
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Mucho se ha escuchado sobre el duelo o proceso de duelo, como afrontarlo, como es preferible lidiar con él y no desvanecerse completamente; entre otras ideas que las personas tienen sobre éste, ¿pero realmente qué es el duelo? cómo identifico sus fases y trabajo en mis emociones para adaptarme a mi nueva realidad?
Conozcamos antes que nada que es el duelo, pues se define como aquella reacción psicológica que genera malestar emocional como consecuencia de una pérdida importante en la vida de la persona. Es un proceso normal por el que pasa toda persona cuando hay una pérdida y donde hay que adaptarse a la nueva realidad, cada persona afronta de manera distinta su duelo y el tiempo que éste le llevará.
Se habla de duelo no sólo para referirse a muerte de un ser querido, duelo es pérdida de:
- Ψ Una mascota
- Ψ Un trabajo
- Ψ Una relación
- Ψ Una amistad
- Ψ Proyecto
- Ψ Objeto
- Ψ Cambio de domicilio
Los síntomas del duelo se podrían parecer a los del TDM (Trastorno Depresivo Mayor) pero ¿qué lo diferencia? hablamos de un trastorno cuando afecta una de las áreas importantes del individuo: biológica, social y psíquica, impidiendo que éste se desenvuelva de manera habitual, se le añade también que debe cumplir con los criterios diagnósticos del DSM V y tener como mínimo 6 meses presentando los síntomas y signos. Entonces, aclarado esta parte decimos que los síntomas comunes son:
Tristeza Llanto prolongado Angustia Apatía Enfado Ira Culpa Soledad Abandono Impotencia Incredulidad | Confusión Preocupación Pensamientos e imágenes recurrentes Sentido de presencia Alucinaciones visuales y/0 auditivas Dificultad en la atención, concentración y memoria. Opresión tórax /garganta Falta de aire | Alteraciones del sueño y de la alimentación Conducta distraída Aislamiento social Llevar o atesorar objetos relacionado con la pérdida Visitar lugares que frecuentaba el fallecido Hipoactividad Hipersensibilidad al ruido |
En fin, una pérdida muy significativa e irreversible que genera dolor emocional, estado de hipoactividad y tristeza en la persona. En el proceso del duelo vemos 4 fases/tareas, definamosla según Parkes y Worden:
- 1. Fase de shock: se experimenta un estado de desconcierto el cual es profundo y el sujeto atraviesa una situación durante la cual la tarea más importante es la de ¨ aceptar la realidad ¨ de lo que está ocurriendo.
- 2. Fase de protesta: el individuo realiza esfuerzos por mantener contacto con el fallecido. La ira se refleja a menudo, pues surgen preguntas comunes de ¿por qué?, ¿qué hice mal? o ¿por qué a mí?, incrementado los niveles de ira y haciendo que el individuo entre en una negación temporal de la pérdida, pues es difícil afrontar la situación.
- 3. Fase de desesperanza: aquí se visualiza una conducta desorganizada, con un sentimiento de indefensión y depresión, hasta que el superviviente se consigue adaptar a su realidad ante la pérdida.
- 4. Fase de reorganización: tiene como consecuencia el restablecimiento de nuevas relaciones y donde el individuo aprende a vivir con la pérdida y poco a poco se va adaptando a su realidad.
¿Cómo puedo manejar mi proceso de duelo?
Cada individuo maneja de distinta forma su proceso, lo primordial es permitirte expresar tu dolor, llorar es parte normal del duelo pues te ayuda a desahogarse y liberar un poco la angustia y tristeza.
Una técnica muy factible es la de hombro-oído-abrazo, habla de tus sentimientos con alguien de confianza ya sea un familiar o amigo que pueda ser soporte y apoyo para ti, que te escuche y que no te juzgue, es más fácil cuando dejas salir esos sentimientos aun termines en llanto, te repito ¡te libera!.
Ya luego que pases de los días reciente a la pérdida claro, que ya te sientas listo, entonces ya puedes iniciar a organizarte y hacer un plan de cómo reponerse. Crea una serie de metas a corto plazo para salir adelante y solucionar los conflictos presentados en el momento.
Permítete recrear tu área social, salidas con amigos cercanos y despejar por momentos tus pensamientos.
El duelo es un dolor biopsico-socio-familiar y espiritual; duele el alma, el pasado, el presente, el futuro; duele la vida. Así, no solo se puede llorar, sino que, además, es sano.
¡Recuerda que, si pudiste superar situaciones pasadas, podrás lidiar con la actual!
