Guanajuato, México.- En un escenario cada vez más complejo para el personal de atención prehospitalaria, la reciente oleada de ataques armados contra ambulancias en el estado de Guanajuato, México, ha desatado una profunda preocupación entre instituciones, profesionales de la salud y organismos de derechos humanos.
El caso más reciente ocurrió el 29 de mayo de 2025, cuando una ambulancia privada fue atacada en la carretera León–Cuerámaro mientras trasladaba a un paciente. El vehículo fue interceptado por hombres armados que abrieron fuego, provocando la muerte del conductor y del paciente. Este hecho se suma a otros ataques similares en semanas anteriores, configurando una preocupante tendencia en la región.
Violencia sin distinción
Según datos de la prensa local y de organismos como el Observatorio de Seguridad de Guanajuato, al menos cinco agresiones a ambulancias han sido registradas en lo que va del año, con saldo trágico para el personal médico, pacientes e incluso familiares acompañantes. Las víctimas colaterales de la violencia son, cada vez más, los que prestan auxilio en situaciones críticas.
El titular de la Secretaría de Salud del estado, Daniel Díaz Martínez, expresó su alarma ante estos hechos y señaló que “es urgente que se refuercen las garantías de seguridad para quienes trabajan salvando vidas. No podemos permitir que los paramédicos se conviertan en objetivos de grupos armados”.
Ambulancias bajo fuego cruzado
Diversos reportes señalan que, en algunos casos, los ataques son resultado de la disputa entre cárteles del narcotráfico. Las ambulancias son utilizadas —sin conocimiento del personal— para el traslado de víctimas de enfrentamientos, convirtiéndose en blancos móviles de facciones enemigas. En otras ocasiones, los agresores simplemente disparan al confundir las unidades con vehículos de seguridad o por sospechar de colaboración con autoridades.
Una amenaza que se extiende
Lo ocurrido en Guanajuato no es un hecho aislado. En estados como Michoacán, Jalisco y Guerrero se han documentado agresiones similares en los últimos años. A nivel latinoamericano, países como Colombia, Brasil y Venezuela también han reportado ataques a personal médico en zonas de conflicto, lo que evidencia un patrón creciente de vulnerabilidad.
Reacciones y medidas
El Colegio de Técnicos en Urgencias Médicas (TUM) de México emitió un comunicado exigiendo que se reconozca el estatus neutral de las ambulancias, conforme a los principios de la Cruz Roja y el Derecho Internacional Humanitario. “Salvamos vidas, no participamos en conflictos. Exigimos protección inmediata y protocolos de seguridad para poder trabajar”, rezaba el documento.
A su vez, se ha propuesto la creación de corredores seguros para unidades médicas y la implementación de escoltas en zonas de alto riesgo, así como una mayor inversión en equipos de geolocalización y botones de pánico para el personal de salud.
Una profesión en riesgo
Paramédicos, conductores y enfermeros que laboran en servicios de emergencia han manifestado su temor de acudir a ciertas áreas, especialmente en horarios nocturnos. La atención prehospitalaria, vital para salvar vidas en los minutos dorados tras una emergencia, enfrenta un desafío mayúsculo: operar en medio de una guerra que no eligió.
Mientras la violencia no cede, el llamado de quienes visten de azul, verde o rojo en las ambulancias es claro: "No nos disparen, nosotros no llevamos armas, llevamos oxígeno".
Consultas
- Milenio – “Ataque armado a ambulancia deja dos muertos en carretera de Guanajuato”, 29 de mayo de 2025. https://www.milenio.com
- El Universal – “Paramédicos bajo fuego: la nueva cara de la violencia en México”, mayo 2025. https://www.eluniversal.com.mx
- Observatorio de Seguridad Guanajuato – “Incidentes violentos contra servicios de salud”, Reporte trimestral 2025. https://seguridad.guanajuato.gob.mx
- Organización Panamericana de la Salud (OPS) – “Violencia contra trabajadores de salud en América Latina”,